Bohemian Vintage se fundo el año 2020, aunque en la mente de su dueña (Alba y Javier), fue mucho antes.

“Estaba trabajando en una joyería de perlas, oro y plata. Mi jefe
que vino de Siria, tenia ya unos 75 años y fue el quien me enseñó
a realizar collares y fabricar joyeria unica artesana. Siempre entre anecdotas e historias, lo cual para mi hizo que al final lo considerase mi inspiración y maestro.

De alguna manera, sabia que no solo era su dependienta y es por eso que aprendí todo de el. Siempre le transmití que queria aprender todo, como si fuese una enponja quería empaparme de toda la información posible de esta preciosa profesión. Me parecía y parece un mundo tan bonito, que no quería que se acabase nunca.

Nunca pensé en tener mi propia marca, ya que no tenía los recursos ni el conocimiento necesario, además era extranjera como mi maestro, por eso me llegué a acomodar con aquella situación. Hasta la jubilación de mi maestro, que hizo que algo en mi interior cambiase y sentí algo muy fuerte que me hizo lanzarme al mundo empresiarial con mi pasión, aunque no tuviese ningún tipo de conocimiento. Junto a mi pareja, íbamos vendiendo baches que aparecieron en el camino, hasta el día de hoy.

Sorprendentemente, estaba preparada en mi mente tanto que las cosas ocurrian y yo seguia adelante y con exito. Iba solucinando papeleos, alquileres con coraje y muchas ganas, hasta que conseguimos un local y nos lanzamos a por el.

Empecé a hacer lo que sabia con lo que aprendí anteriormente y me sorprendió lo preparada que estaba, en cuanto a la artesania profesional tenía ya muchos conocimientos, aunque yo no era consciente de eso.

Desde el principio, los primeros clientes y clientas nos cogieron mucho cariño y por ello, empezamos a tener más cliente muy rapidamente, además de muchos otros de la antigua joyería de mi maestro.

El nombre de nuestra joyería vino sin más, nos llegó un día, y aunque al principio tuvimos que añadir moda (que la verdad no me hacía nada de ilusión), debido al local tan grande que teniamos, pasados cuatro años por fin me arme de valor a realizar mi proyecto soñado.